Jugadores revelación (II): Jóvenes

En las ligas fantasy, los jugadores jóvenes siempre parecen sobrevalorados por managers imbuidos de la promesa de lo desconocido y del natural optimismo con el que se afronta una nueva temporada. Parecería que un jugador nunca deja de progresar mientras sigamos considerándolo joven. No hemos aprendido nada de Kwame Brown.

Es cierto que entre los jugadores de menos de 25 años suelen estar las mayores sorpresas de cada temporada. Son los que tienen mayor margen de mejora pero también son los más difíciles de predecir. Si buscas elecciones especulativas, éste es tu sitio.

Habitualmente, los jugadores mantienen su rendimiento de una temporada a otra y eso nos hace sentir que vivimos en un mundo organizado y controlable. Los jóvenes son caóticos. Hay jugadores que comienzan su carrera de forma discreta y se destapan en su tercer o cuarto año (Rajon Rondo, Gerald Wallace, Aaron Brooks -aunque este último sea discutible-), otros que se estancan rápidamente tras un prometedora temporada rookie (Ben Gordon, Emeka Okafor, Thaddeus Young, LaMarcus Aldridge), de algunos nunca llegamos a ver más que destellos (Ramon Sessions, Tyrus Thomas).

Para tratar de aclarar esta situación tenemos un punto de apoyo estadístico: Los mayores incrementos de producción en un jugador ocurren su segunda o tercera temporada. En algunos casos, la mejora es sostenida en sus primeros años para después estabilizarse. Otros sufren el sophomore slump, cuando tras una buena primera campaña su rendimiento se estanca o desciende en su segundo año para volver a ascender en la tercera. LeBron James es un ejemplo del primer caso, Carmelo Anthony lo es del segundo.

Encontraremos ambas situaciones este año. Ya he hablado de mi preferencia por reducir los riesgos en el draft, así que comenzaremos por las apuestas más seguras. He incluido una referencia al riesgo y recompensa de cada jugador en caso de ser elegidos en la posición en la que suelen aparecer en los rankings.

Ligas de diez equipos

O.J. Mayo (MEM): La segunda temporada de Mayo mostró escasa progresión respecto a la primera. Con el fin de añadir nuevas facetas a su juego, este verano probó a jugar de base con los Grizzlies en la summer league con un desastroso balance de seis asistencias y quince balones perdidos en los dos encuentros que disputó. ¿Cómo encaja la etiqueta de «revelación» en él? Lo mejor de Mayo es que no conlleva casi ningún riesgo: su papel en Memphis seguirá siendo el mismo y ya ha demostrado lo que sabe hacer. Con 22 años no podemos esperar que mejore radicalmente su juego, pero aún tiene margen de progresión. Los tiradores suelen sufrir el sophomore slump para después reponerse y alcanzar un nivel superior, y ante la mediocridad de Mike Conley cabe la posibilidad de que Mayo finalmente desarrolle su habilidad como director de juego. Riesgo: Muy bajo. Recompensa: Media.

Eric Gordon (LAC): Otro jugador que ha sufrido durante su segundo año. Lesiones, cambios de entrenador y mayor atención defensiva de los rivales han impedido que progresara como se esperaba tras una magnífica temporada rookie. Pese a ello, Gordon sigue siendo la principal esperanza de futuro de los Clippers junto con Blake Griffin y podemos esperar de él que recupere la efectividad en el tiro que mostró en su primera temporada (45,6% FG, 85,4% FT) y promedie 20 puntos y cinco asistencias. Como en el caso de Mayo, es una apuesta segura. Riesgo: Muy bajo. Recompensa: Media.

Brandon Jennings (MIL): La mayor sorpresa de la primera mitad de la temporada pasada, Jennings ofreció muy buenas estadísticas acompañadas del inmenso problema que significaba su inaceptable 37,1% en 14,8 tiros de campo por encuentro, el peor porcentaje ponderado de toda la NBA. Eso, unido a un descenso en su producción conforme avanzaba la liga, ha hecho que se aleje sideralmente en los rankings de sus compañeros de promoción Tyreke Evans y Stephen Curry.  Esta temporada Jennings continuará siendo el base titular indiscutible de los Bucks y su líder en ataque, si bien contará con la ayuda de la media docena de aleros capaces de anotar de los que dispone Milwaukee (Maggette, Salmons, Ilyasova, Delfino, Gooden, Douglas-Roberts) y no necesitarán asumir toda la responsabilidad ofensiva como ocurrió en los playoffs de la pasada temporada (18,7 puntos de media en siete partidos). La ausencia de un veterano como Luke Ridnour, que llevaba el mando en muchos momentos delicados de los partidos, le obliga a asumir la responsabilidad completa de guiar al equipo. Con una mejora en sus porcentajes, Jennings se convertiría en un excelente segundo base para cualquier equipo fantasy. Riesgo: Bajo. Recompensa: Alta.

Anthony Randolph (NYK): Todo el mundo esperaba grandes cosas de él la temporada pasada después de que en su temporada rookie aparentara ser la segunda llegada del joven Lamar Odom, alguien capaz de hacer de todo en el campo. Tras sufrir una dosis intensiva del tratamiento Don Nelson para jóvenes promesas y perderse un buen número de partidos por lesión, Randolph llega a unos Knicks en los que debería ser el alero o ala-pivot titular (dependiendo de donde se sitúen Gallinari y Stoudemire, y anulando de paso el valor fantasy de Wilson Chandler). Randolph aún es un jugador por hacer, pero si es capaz de correr y encontrar sus huecos como venía haciendo David Lee y pone en uso sus excepcionales cualidades defensivas, podríamos estar ante un jugador que cambie el destino del equipo que lo elija. Riesgo: Alto. Recompensa: Muy alta.

Robin Lopez (PHX): Los Suns tienen un único jugador capaz de jugar con garantías en la posición de pivot, y ese es Lopez. Parece que Alvin Gentry planea jugar con Turkoglu en la posición de cuatro (una de las apuestas más arriesgadas que veremos este año en la NBA), acompañado en las posiciones interiores por nulidades defensivas como Channing Frye y Hakim Warrick. Con este escenario, la participación de Lopez es esencial. La última temporada en Phoenix demostró que es un buen anotador al poste bajo y un decente reboteador y taponador. También, que tiene problemas con las lesiones (56 partidos de media y 14 minutos por partidos en sus dos años como profesional). Finalizó la pasada campaña con una lesión en la espalda de la que parece recuperado, pero los precedentes exigen prudencia. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

Tiago Splitter (SAS): Le hemos visto progresar durante años hasta convertirse en la fuerza más dominante de la ACB. En San Antonio partirá como titular en ese puesto de cinco indefinido que ocupan los jugadores que acompañan a Tim Duncan. Splitter es mejor que cualquier compañero que haya tenido Duncan desde David Robinson (¿Rasho Nesterovic, Nazr Mohammed, Fabricio Oberto, Kurt Thomas?) y aparece cuando comienza su decadencia. Popovich parece que tiene una idea concreta de su juego («no nos va a liderar en anotación«) aunque más parece que estuviera reduciendo la presión alrededor del jugador que dando una pista de su papel en el equipo. Existen muchas cuestiones por definir relacionadas con Splitter, pero esperar de él un doble-doble con tres asistencias, un robo y 1,5 tapones no parece fuera de lugar. Riesgo: Medio. Recompensa: Muy alta.

Jrue Holiday (PHI): Fue mejorando conforme avanzaba su año rookie. Cuando Louis Williams se lesionó, pudo demostrar que merece un puesto en la NBA. No anota muchos puntos, pero tiene habilidad para ofrecer rebotes y asistencias con independencia de los minutos que juegue. Sobre todo destaca su capacidad para robar balones, promediando 1,4 en los partidos en los que fue titular. Holiday parte esta temporada como titular, pero Williams (mejor anotador y peor director de juego) exigirá sus minutos. Riesgo: Medio. Recompensa: Media.

Ligas de doce equipos

Nicolas Batum (POR): La temporada pasada no debutó hasta finales de Enero por problemas en un cartílago del hombro derecho. Compartiendo minutos en el puesto de alero con Travis Outlaw (promedió 24 por partido) fue capaz de jugar partidos estupendos un día y horrorosos al siguiente. Potencialmente hablamos de alguien capaz de aportar en todas las categorías salvo asistencias (un pequeño Shawn Marion de sus años mozos sin tanta exuberancia estadística) con la titularidad asegurada tras la marcha de Outlaw a Nueva Jersey. Riesgo: Bajo. Recompensa: Alta.

Ronnie Brewer (CHI): Tras una mediocre campaña a medio camino entre Utah y Memphis, Brewer vuelve al rol en el que destacó con los Jazz. Será el escolta titular en Chicago haciendo junto a Derrick Rose un trabajo similar al que venía realizando con Deron Williams y su perpetuo compañero Carlos Boozer. No podemos esperar que anote más de 10 puntos, pero sus excelentes porcentajes de tiros de campo y esos dos robos por partido son todo lo que se puede pedir a un jugador que podrás elegir a partir de la décima ronda del draft. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

D.J. Augustin (CHA): Con Raymond Felton en Nueva York, los Bobcats tienen dos candidatos para el puesto de base titular. Augustin lleva tiempo en el equipo y a pesar de que nunca ha demostrado habilidad para distribuir el balón, parece que lo ha hecho bien en partidillos informales durante el verano. El otro candidato es Shaun Livingston, en cuya lesión de rodilla de 2007 no voy a insistir y que hizo un buen final de temporada pasada con los disfuncionales Wizards. Inicialmente el puesto es de Augustin, que si mejorara su pútrido 38,6% en tiros de campo del año pasado se convertiría en un tercer base útil a elegir de la novena ronda en adelante. Riesgo: Medio. Recompensa: Media.

Amir Johnson (TOR): La temporada pasada en los Raptors no demostró nada, pero tras la marcha de Chris Bosh es el cuatro titular del equipo. Johnson es atlético y muy fuerte, lo que le permite rebotear y taponar con cierta facilidad. Por lo demás, es un jugador con escasos fundamentos que no debe tener ninguna responsabilidad en ataque. Su competencia en el puesto es una versión de sí mismo seis años mayor y con menos salto, Reggie Evans, y el rookie Ed Davis que estará de baja por una lesión de menisco hasta mediados de Noviembre. Si precisas de un especialista defensivo en las últimas rondas del draft, Johnson es tu hombre. Riesgo: Medio. Recompensa: Media.

Ligas de catorce o más equipos

JaVale McGee (WAS): Tuve a McGee en mi equipo el año pasado y vi lo que puede hacer. Todos los seguidores se emocionan al ver en su equipo a un pivot joven y atlético capaz de moverse de forma semi-coordinada y de taponar con cierta asiduidad. Fran Vázquez ha ganado millones gracias a eso, y ahora McGee está disfrutando de la atención que no merece. Invitado a entrenar con el equipo estadounidense que ha ido al Mundial (probablemente el peor jugador en la pista), a McGee aún le quedan años hasta convertirse en un jugador solvente, si alguna vez ocurre. El peor escenario para él (y por malo no sería sorprendente) es que se quedara tan estancado como el que será su suplente, Hilton Armstrong. McGee tendrá minutos para demostrar ql menos qu puede evitar hacer faltas y que es capaz de poner tapones. Sus promedios por 36 minutos son muy buenos: 14,4 puntos, 9,o rebotes y 3,8 tapones, un signo prometedor, pero me costaría apostar por él a estas alturas de su carrera como algo más que mi tercer pivot. Riesgo: Bajo. Recompensa: Alta.

Josh McRoberts/Tyler Hansbrough (IND): Hansbrough parte como titular en la posición de cuatro de los Indiana Pacers tras hacer un papel muy decente como sustituto de Troy Murphy en los partidos que disputó la temporada pasada. Sin embargo sus problemas de oido, que le provocan vértigo y que sólo le permitieron jugar 29 partidos, parece que no remiten. Así, el principal candidato para ocupar la titularidad es Josh McRoberts, con la lejana amenaza del especialista en rebotes Jeff Foster. McRoberts no ha demostrado gran cosa en sus tres años en la NBA, pero sus promedios por 36 minutos (12,3 puntos, 8,7 rebotes, 1,2 robos, 1,1 tapones) no son desdeñables, en especial si logra complementarlo con algo parecido al tiro de tres puntos que con frecuencia utilizaba Murphy. Riesgo: Medio. Recompensa: Media.

Marreese Speights/Spencer Hawes (PHI): Speights jugó bien durante algunas fases de la temporada pasada y con la marcha de Samuel Dalembert podría convertirse en el pivot titular de los Sixers. El problema es que el recién llegado Hawes parece encajar mejor en el rol de pivot grande y fundamentalmente defensivo que no molesta a Elton Brand en ataque. Hasta que no veamos cómo se distribuyen los minutos entre ellos durante la pretemporada no podremos hacernos una idea de su valor real. Speights es un reboteador decente y un defensor mediocre, mientras que Hawes, a pesar de su tamaño, no es mucho mejor en ninguno de esos aspectos. El que logre la titularidad y disponga de 28 minutos de juego hará unos 13 puntos, 7,5 rebotes, casi un robo y 1,4 tapones por partido, estadísticas muy útiles si hablamos de un jugador elegido en la última ronda del draft. En un par de semanas sabremos por cuál de ellos apostar. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

Rodrigue Beabouis (DAL): Los Mavericks están muy ilusionados con la progresión de Beabouis. Al fin y al cabo, es el único jugador joven que tienen. Inicialmente se espera que rote con Jason Kidd en la posición de base (el propio Kidd ha reconocido que habrá ocasiones en las que salga desde el banquillo y Beabouis sea el titular). Sus características son fundamentalmente ofensivas, del estilo de Leandro Barbosa, con un buen porcentaje de tiros de campo, triples y robos de balón. Por desgracia se rompió el pie entrenando con la selección francesa y se perderá toda la pretemporada. Dependiendo de las noticias que vayan surgiendo en las próximas semanas veremos si merece la pena elegirlo en el draft o simplemente tenerlo en consideración para cuando comience la liga. Riesgo: Alto. Recompensa: Media.

Jeff Teague (ATL): Otro base joven aprovechando la decrepitud de los titulares. Con la caída en picado experimentada por Mike Bibby en los dos últimos años y la posibilidad de que Jamal Crawford cambie de aires, las esperanzas están puestas en Teague. El entrenador Larry Drew ha declarado que a menos que demuestre que es mejor que Bibby en la pretemporada, el puesto titular seguirá siendo para el veterano, pero al mismo tiempo ha dejado ver que ambos compartirán minutos. Si has seguido la trayectoria de Bibby estarás de acuerdo en que no falta mucho para que Teague le arrebate el puesto. Riesgo: Alto. Recompensa: Media.

Fuera del radar

Omri Casspi/Donté Greene (SAC): Ambos parten con opciones en el puesto de alero, si bien parece que Casspi se perfila como el titular. Al final de la pasada temporada Casspi se desfondó (el proverbial rookie wall) pero antes había dado a los seguidores de los Kings razones para ilusionarse. Promedió 10,3 puntos, un triple y 4,5 rebotes en 25 minutos de juego ofreciendo además buenas cualidades en la defensa del uno contra uno. Este año debería incrementar su papel en el ataque de Sacramento, si bien sus minutos podrían limitarse por la presencia de Greene, un jugador muy atlético y capaz de jugar en las posiciones de escolta y alero que mostró gran potencial en su segundo año, con exhibiciones como los seis triples y seis tapones con que terminó el partido ante los Knicks del 25 de Noviembre. A falta de que se defina la rotación en la pretemporada, Casspi merece una elección en la última ronda del draft y Greene que lo mantengamos vigilado. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

Greg Monroe (DET): Los Pistons son un desastre. ¿Cómo definirlos de otra manera? Es como si  Joe Dumars hubiera querido reconstruir sus Bad Boys pero en lugar de encajar piezas de desecho para construir una máquina de matar ha creado un artefacto… menos letal. Mientras que el juego exterior sólo muestra redundancias e ineficiencias (Hamilton, Gordon, Pince y ahora McGrady), en el puesto de ala-pivot encontramos a dos jugadores completamente opuestos (Villanueva y Jerebko) y en el de pivot, únicamente, al cadaver animado de Ben Wallace. La temporada pasada Jerebko y Wallace compartieron la titularidad a pesar de que son dos jugadores similares que hacen el trabajo sucio, aportan energía y centran sus esfuerzos en la defensa. Hay quien piensa que el equipo estaría más equilibrado si Villanueva, mucho mejor atacante e infinitamente peor defensor que Jerebko, acompañara a Wallace desde el comienzo. Sin embargo, otro escenario está ganando fuerza: Que tras unos primeros meses de adaptación, Wallace ceda el puesto de pivot titular al rookie Greg Monroe. Los aficionados parecen encantados con su juego ofensivo, habilidad para el pase e inteligencia en la pista, y rápidamente lo están convirtiendo en uno de sus jugadores favoritos (trayéndoles algo de esperanza ante tanta medioridad). Si en pretemporada dispone de bastantes minutos tendremos una señal más de que los Pistons planean convertirlo a corto plazo en su referencia interior. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

Nikola Pekovic (MIN): Sus números en Europa hacen que los blogs que siguen a los Timberwolves lo comparen incesantemente con Marc Gasol. Tendrá que hacerse en hueco en la superpoblada rotación interior de Minnesota (Love, Milicic, Beasley, Tolliver), partiendo en principio como pivot suplente, aunque también puede jugar como cuatro. En este scouting vemos que es un buen anotador interior y defensor del bloqueo y continuación. Sus problemas están en la defensa de ayudas y el rebote. Creo que es un buen jugador para el triángulo ofensivo de Kurt Rambis y que formaría una gran pareja con Kevin Love. Y conociendo a Milicic, es posible que lo veamos como titular tras el primer mes de competición. Riesgo: Bajo. Recompensa: Media.

Hay muchos otros jugadores jóvenes a los que se les está prestando la atención debida y que si juegan bien no podrían considerarse como «revelación». Se espera mucho de Andray Blatche tras su excelente final de temporada. Lo mismo ocurre en los Nets con Anthony Morrow o con Terrence Williams, aunque parece que este último no dispondrá de demasiados minutos. De Darren Collison hay quien piensa que es mejor jugador fantasy que Derrick Rose o Russell Westbrook. Marcus Thornton, Roy Hibbert, Serge Ibaka y J.J. Hickson están siendo suficientemente valorados en los drafts como para que diga nada sobre ellos.

Salvo Monroe, del que he leído en suficientes ocasiones sobre su potencial en Detroit como para incluirlo en la lista, no he nombrado a ningún rookie. Hace años que no he visto un partido de la NCAA y no tengo ni idea de cómo encajarán en sus equipos. En general los evito ya que suelen hacer un partido bueno y dos malos. Tienen un gran mes de noviembre y después desaparecen tras el All-Star. Elegiría a John Wall si estuviera disponible en la séptima ronda, pero eso no ocurre nunca. En Evan Turner o DeMarcus Cousins podría gastar mi última elección. Con los demás, ya veremos qué ocurre cuando comience la temporada…